31 de enero de 2023
CLAVES DEL ANÁLISIS
No hay duda de que el sector insurtech se encuentra en pleno proceso de expansión e innovación, dando lugar a un nuevo ecosistema de startups que, bien como competidoras o aliadas de las grandes aseguradoras tradicionales, están experimentando para mejorar los procesos operativos y la oferta de valor especialmente en terrenos como la experiencia de cliente.
La actividad inversora es una de las palancas más importantes para el sostenimiento de todo este impulso innovador y, durante el periodo post-pandemia, en el año 2021, se produjo un fuerte incremento en el volumen de fondos de capital riesgo destinados al sector insurtech. En este análisis hemos estudiado la evolución que ha seguido dicha actividad en el último año y el punto en el que se encuentra actualmente el panorama venture capital, identificando los principales ámbitos de oportunidad existentes en los mercados más maduros:
Después del auge exponencial vivido en 2021, la primera mitad de 2022 estuvo marcada por un declive en las inversiones y es que el sector experimentó un retroceso del -56% en el primer trimestre del año, si lo comparamos con el mismo periodo de 2021.
Sin embargo, en el segundo trimestre, la actividad inversora insurtech se ha ido estabilizando de nuevo, en términos de volumen de fondos, aunque el número de acuerdos ha seguido cayendo un -16% situándose en el número más bajo registrado desde el cuatro trimestre de 2020.
Veamos, a continuación, algunas cifras clave relativas al tercer trimestre de 2022:
El volumen total de financiación insurtech a nivel global se situó en 2.300 millones de dólares, la cifra más baja registrada desde el 2Q de 2020. No obstante, en el cómputo total del año, el volumen se ha mantenido algo más estable y hasta la fecha se ha alcanzado la segunda cifra más alta de inversión registrada, con 7.200 millones en financiación, esperándose que para final de año se alcancen los 9.600 millones de dólares.
El 63% de toda la financiación se alcanzó a través de grandes megarondas, siendo este el mayor porcentaje registrado desde el 4Q de 2021. En total, en el 3Q de 2022 se registraron 7 megarondas con un valor superior a los 100 millones de dólares, lo que representa un total de 1.580 millones.
Sin embargo, por primera vez desde el 2Q de 2018, este trimestre no se registró el surgimiento de ningún nuevo unicornio fintech, siendo 42 el número de unicornios insurtech que existen actualmente en el mercado.
A nivel regional, Asia es la región que ha registrado el mayor impulso inversor en el periodo más reciente, habiendo registrado un 48% de crecimiento y situándose ya como el segundo mercado por detrás de Estados Unidos en términos de volumen de acuerdos alcanzados.
Sin embargo, a pesar de la estabilización vivida durante este año, la industria aseguradora todavía está necesitada de grandes transformaciones tecnológicas por lo que las fuentes de investigación de mercado apuntan a que se trata de un sector con una inversión aún por debajo de sus necesidades si se compara con la evolución que han experimentado los ecosistemas de startups de otras industrias como por ejemplo es la de las fintech en el ámbito de la banca. Por lo tanto, se espera que aún se produzcan nuevos cambios a futuro y que, durante los próximos años, se sigan registrando nuevos incrementos en la actividad inversora, más allá de la euforia vivida en 2021.
En la siguiente gráfica podemos ver cómo el volumen de financiación insurtech registrado durante los últimos años aún se encuentra muy por debajo en comparación con otras industrias:
Existe aún, por lo tanto, una oportunidad de crecimiento potencial estimada en unos 6 billones de dólares que se va a ver además impulsada por otra serie de variables o vectores de cambio que son los siguientes:
A nivel de segmentos, datos recientes de Deloitte arrojan que el área de seguros personales registró aproximadamente la mitad de todo el volumen de inversión insurtech efectuado en 2021, y ha seguido siendo la categoría dominante en la primera mitad de 2022, seguida del área de seguros comercial
En cuanto a las mayores rondas de financiación registradas en lo que llevamos de año, si analizamos las 10 mayores rondas por volumen de inversión, a nivel global, podemos identificar las siguientes tendencias:
2022 nos deja además un total de 6 nuevos unicornios insurtech, varios de los cuales están presentes en la anterior lista de las top10 megarondas. Así, además de Branch Financial, Betterfly y Accelerant, también se convierten en unicornios las siguientes tres:
En lo que respecta al mercado español, aunque en los dos últimos años se ha producido un auge exponencial de la actividad insurtech, el sector se encuentra todavía un paso por detrás en su evolución con respecto al mercado europeo, el cual cuenta con un mayor nivel de madurez y donde las rondas de inversión son algo más generalizadas.
Sin embargo, el futuro es optimista precisamente por esa necesidad de reducir la brecha europea que tendrá que ser sustentada con incrementos en las inversiones.
Se espera, además, que el ecosistema startup español se vea impulsado por la tan esperada llegada del SandBox financiero que ya está permitiendo empezar a experimentar con nuevas iniciativas de negocio disruptivas, a través de entornos controlados.
Aunque este año no figura ninguna startup española en la lista de las top10 con mayor inversión a nivel global, sí se han podido ver también importantes acuerdos con grandes volúmenes de inversión en áreas específicas como las plataformas digitales de distribución de seguros, las soluciones open data y las aseguradoras 100% online especializadas en ramos de vida u hogar.
En la siguiente gráfica, podemos ver cuatro grandes rondas de financiación identificadas este mismo año, con importes superiores al millón de euros.
Por lo tanto, se espera un panorama positivo para el desarrollo del ecosistema insurtech español que podría verse especialmente impulsado por las inversiones dedicadas al desarrollo de tecnologías punteras como: la inteligencia artificial, la realidad virtual y aumentada, blockchain y la gestión de criptoactivos, las redes de dispositivos conectados y el Internet de las Cosas o las plataformas inteligentes de analítica de datos.