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Medicamentos impresos en casa ¿el futuro de la industria farmacéutica?

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CLAVES DEL ANÁLISIS

  • Con la llegada de la impresión 3D de medicamentos, se pueden reducir los errores médicos, el sobrecoste en gasto sanitario y la complejidad en la administración de las dosis.
  • En un escenario futuro, cada persona podría contar con una impresora 3D en su casa desde la cual imprimir medicamentos personalizados en base a sus parámetros médicos particulares y en tiempo real.
  • Esta innovación es además un factor crucial para la transformación de la industria farmacéutica hacia un modelo de producción más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
  • Aunque se trata de una innovación que todavía está en fase experimental, ya se están lanzando al mercado los primeros prototipos de impresoras 3D de medicamentos diseñadas para su comercialización entre el gran público por parte de compañías especializadas como Aprecia o FabRX.

En la actualidad, el consumo de medicamentos se lleva a cabo en base a cajas con dosis estándar. Sin embargo, cada persona necesita una dosis concreta y esta puede variar según la situación y la evolución de su prescripción médica. Por este motivo, las personas a menudo consumen cantidades incorrectas de medicación, lo cual puede derivar en efectos secundarios o en un sobrecoste excesivo. Sin embargo, los avances en tecnología de impresión 3D podrían poner fin a esta problemática dando lugar a una medicación mucho más personalizada y adaptada a las necesidades individuales.

En el año 2015 se llevó a cabo la primera impresión en 3D de un medicamento personalizado. Denominado Spritam, y utilizado para el tratamiento de la epilepsia, el medicamento fue impreso por la compañía Aprecia Pharmaceuticals tras la aprobación por parte de la FDA (la agencia estadounidense encargada de la regulación de medicamentos). Este hito marcó oficialmente el inicio de la fabricación de píldoras personalizadas y, en la actualidad, ya se están desarrollando los primeros prototipos de impresoras 3D capaces de diseñar e imprimir pastillas bajo demanda.

La estadounidense Aprecia es, en este momento, el líder global de este nuevo mercado, y está llevando a cabo múltiples acuerdos de colaboración con otras empresas privadas, y diferentes organismos para la investigación en este campo. Por ejemplo, en abril de 2021, firmaron una alianza con la empresa finlandesa Nanoform, enfocada en la fabricación de nanopartículas, para explorar las posibles sinergias que pueden existir en este espacio entre ambas compañías.

Otras empresas que operan ya en esta industria son: las multinacionales farmacéuticas Merck y GlaxoSmithKline, grandes compañías del sector energético o tecnológico como General Electric, Hewlett Packard y 3D Systems, y otras de más reciente creación especializadas específicamente en la impresión 3D como BioDuro y FabRx.

La última de ellas, la británica FabRx, presentó en abril de 2020 la primera impresora 3D comercializable de este tipo. Actualmente ya están en contacto con reguladores de todo el mundo para hacer disponible el dispositivo para el gran público.

Esta innovación puede ayudar, además, a disminuir los casos de errores médicos desde el momento en que la responsabilidad de asignar los medicamentos, y las dosis concretas, puede recaer en sistemas de inteligencia artificial entrenados para determinar, con mucha mayor precisión, cual es la cantidad exacta de medicamento que debe ser asignada a cada paciente, según lo indiquen en cada momento sus parámetros físicos y sanitarios.

Así, las impresoras podrían estar diseñadas para imprimir medicamentos únicamente cuando se den unos parámetros concretos. Por ejemplo, dependiendo de la temperatura del paciente, determinarían si este tiene fiebre o no, emitiendo la pastilla necesaria, y con la dosis adecuada, en función de lo alta o baja que sea dicha fiebre.

Otro problema que la impresión 3D puede solventar es la complejidad en la administración de los medicamentos, la cual sufren especialmente algunos pacientes que consumen una gran cantidad y variedad de pastillas al día.

Entender las pautas de consumo y cumplir con las tomas, y las dosis de cada medicamento, puede resultar complicado y la tecnología 3D sirve para simplificar todo este proceso ya que que permiten imprimir varios medicamentos, incluyendo únicamente las dosis necesarias de cada uno, en una única pastilla, pudiendo el paciente cubrir sus diferentes necesidades con una sola toma.

La última de las oportunidades que ofrece esta tendencia es la contribución a la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente. Desde el momento en el que la industria farmacéutica empezase a alejarse de la producción masiva, la adopción de la impresión personalizada de medicamentos presentaría un potencial enorme para revolucionar el mercado y evitar la generación excesiva de plásticos y desperdicios químicos.

Este potencial disruptivo enfrenta, no obstante, también una serie de barreras. La primera que hay que tener en cuenta es la regulación, dado que se trata de un espacio en el que los organismos públicos todavía no se han posicionado, ni han establecido estándares comunes definitivos para la fabricación y la utilización de estos nuevos dispositivos. Por lo tanto, se espera que estas normativas tengan que desarrollarse en los próximos tiempos y aun está por ver qué impacto tienen en la evolución de la tendencia. Por otro lado, como ocurre con la mayoría de las últimas tecnologías digitales disruptivas, la impresión 3D también enfrenta el problema creciente de la cibserseguridad. Y es que, la posibilidad de acceder a estos dispositivos de forma remota con fines malintencionados presenta un gran riesgo, dado que los ciberatacantes podrían aprovechar la situación para tomar el control de las redes o manipular los datos y los valores establecidos por las maquinas con fines realmente peligrosos para la salud de las personas.

Por lo tanto, la impresión 3D es una innovación que, sin duda, promete transformar la industria farmacéutica y sanitaria tal cual la conocemos pero antes habrá de superar las barreras tecnológicas y regulatorias que enfrenta una tecnología tan disruptiva como esta.